Una toxina obliga al control de los medregales y otros grandes peces

Hoy en el periódico Diario de Avisos, se publica una noticia con el mismo titular de este artículo, en donde dice:

Los pescadores del sur han mostrado su preocupación por el control sanitario del Gobierno de Canarias a los medregales que superen los 15 kilos de peso como medida preventiva para evitar la ciguatera (intoxicación alimentaria) en ésta y otras especies. 

 Nosotros nos vamos a referir al protocolo seguido por el Gobierno de Canarias, que consiste en: Que al carecer de test colorimétrico de la ciguatoxina, según dicen desde Pesca, la Empresa que vendía esos test ya no está, pero nosotros somos de la misma opinión de los pescadores del Sur de Tenerife, se debe a presupuesto.

Existen especies que debido al su peso, hay que realizarle ese test de la ciguatera, tales como: Peto mayor de 30 kilos, abade mayor de 12 kilos, sierra mayor de 10 kilos, etc..., asi como medregales superiores a 15 kilos. Al carecer de Test colorimétrico de la ciguatoxina las especies anteriormente mencionadas deberan ser identificadas con una nota de primera venta individual, grapando en su aleta caudal o dorsal su etiqueta. De esas especies hay que tomar 350 gramos de carne, con peso superior al indicado, se depositarán en una bolsa de plástico alimentario transparente, bien cerrada y marcada con la fecha y con una copia de la etiqueta. En el tema de los medregales superiores a los 15 kilos, se permite  la comercialización de ejemplares iguales o inferiores a 15 kilos, pero si dicho medregal supera los 15 kilos se mantendrá en congelación y se tomará muestra de un trozo del pescado para enviarlos a analizar a un laboratorio gallego, y cuando la Viceconsejería tenga los resultados se lo hará saber a los pescadores, entonces si el test es negativo, se libra al consumo. La Viceconsejería de Pesca dijo ayer que se ha podido detectar algún caso de intoxicación en Fuerteventura “aunque todavía no está confirmado con seguridad”, matizan, y por ello “se han tomado medidas” para controlar esta toxina, presente en un alga ingerida por el pescado. “La seguridad de los consumidores está por arriba de cualquier situación, nosotros dejamos claro que no prohibimos la captura del medregal, sino su comercialización, si previamente no ha pasado los análisis”, explican desde el Gobierno de Canarias.

Al refrigerar la mercancía (Medregal) y retrasar la venta, lleva consigo que afecta  a la economía de los pescadores que viven de la captura de estos animales de gran tamaño, por lo tanto consideramos que el gobierno de Canarias debería de apoyar a los pescadores profesionales económicamente, para cubrir las pérdidas que ocasionaría en retraso de la venta de esa especie capturada. No es lo mismo el precio obtenido por un medregal fresco, que congelado.

NOTA: DEBIDO AL CONTROL RIGUROSO QUE SE REALIZA A LAS ESPECIES DENOMINADAS EN ESTE ARTÍCULO, CUANDO SUPERAN LOS KILOS MENCIONADOS, SUS CONSUMO ES MUY SEGURO.