Una persona especial

Conocí a Antonio y a su padre una mañana en la consulta de oncología  del hospital Niño Jesús. El acento de sus conversaciones me sonó familiar y como era la primera vez que les veía me acerqué a preguntar si eran canarios. Una vez hechas las presentaciones, me contaron que eran de las Palmas, pero que habían vivido también en el Hierro y Tenerife, en definitiva que como muchos canarios se habían buscado la vida allí donde había trabajo. Pero un día la enfermedad llamó a sus puertas y Antonio enfermó de cáncer, esa enfermedad que a todos nos suena a tragedia pero que no conocemos hasta que nos toca de cerca. Antonio era un joven con mucha vida. Con dieciséis años, lleno de ilusiones,  ansiaba ser músico sobre todas las cosas. 

Me acuerdo que me comentó su padre que lo del frío lo llevaba fatal, como buen canario, era una persona como todos los adolescentes con su manera de ver y sentir la vida, un joven lleno de sueños luchando contra un gigante contra el que a veces se gana y a veces se pierde. Antonio estaba lleno de sueños de música, y de vida. Era una persona vital, alegre y tímida como buen adolescente, y con ese aire canario de timidez y de sorpresa ante un mundo que a veces se torna injusto.

Esta enfermedad en adolescentes es muy difícil de enfrentar y es que al no ser del todo niños o adultos, los procesos y tratamientos se hacen más duros. Antonio era en definitiva una persona con muchos sueños, sueños que un día se frustraron porque perdió la batalla, esta injusta y triste batalla, los sueños y ambiciones de curación que tenía su padre se esfumaron un buen día y Antonio pasó a formar parte de mis estrellas particulares, esas estrellas que tengo ahí y a las que recurro cuando las cosas no van bien, y a las que también les pido que me den fuerza a mí, a mi mujer y a mi hija, y a todas las familias que conozco que están pasando por este trance amargo y triste del cáncer infantil y adolescente. Porque si el cáncer en cualquier persona es triste, imaginad cómo es en estos casos.

Una historia inspirada en Antonio va a estar en el cine. Se va a estrenar el dieciséis de diciembre la película MAKTUB. Esta palabra en árabe significa lo que está escrito, dirigida por Paco Arango, presidente fundador y alma mater de la fundación Aladina, que trabaja en los hospitales apoyando a los adolescentes con esta enfermedad, haciendo un trabajo encomiable y poco conocido. Sirvan estas palabras para que conozcáis la labor de ésta y  otras fundaciones que trabaja por el bien de los niños hospitalizados y sus familias. Espero que la película sea un éxito y si podéis vayáis al cine a verla, estaréis apoyando una buena causa.  También os pido que en la mayoría de vuestras posibilidades os hagáis donantes de médula ósea. Informaros y veréis que es más sencillo de lo que parece, pero lo más importante es que salvaréis muchas vidas.

En internet existe mucha información sobre la donación y las asociaciones que se dedica a ello y seguramente en vuestro centro de salud os podrán informar adecuadamente. También me gustaría que se apoyara la investigación de este tipo de enfermedades. El simple hecho de que se difunda por el boca a boca no es suficiente. Lo que de verdad hace falta es que nos concienciemos todos y pidamos que se fomente la investigación y colaboremos haciéndonos donantes de sangre y médula ósea  (repito es muy, muy sencillo) por el futuro de estos niños, y la curación de estas enfermedades a las que a veces miramos desde fuera con cara de circunstancias y de pena, y por el contrario hay que mirarlo con valentía, optimismo y sobre todo solidaridad.

Desde aquí sólo espero que veáis la película y descubráis un poco la historia de este paisano nuestro que brilla en mi cielo particular y que desde ahora sea el vuestro. Que la historia de esta persona especial que representa  también a otras personas anónimas, de niños que son un ejemplo, sirva para despertar conciencias y por lo menos que se sepa que si todos queremos podemos ayudar. Un saludo. 

                Juan Salvador Pérez Hernández. (Un bagañete exiliado del mar)