POESÍA

Este verso que aquí su rima busca

empieza en otros versos no acabados

que hace mucho comencé y casi asusta

pensar cuantos inviernos han pasado.

Este verso que ahora ves, nació a tu lado,

anidó en tu pecho, allí quedó dormido,

se nutrió de ti y paciente, suspendido

esperó a sentirse deseado.

Yo en tus ojos leía sus palabras

sabía que la poesía estaba en ti

pero libre la quería, solté amarras

y cuando te vi alejarte, te seguí.

El verso se mezcló con tus cabellos,

en tus manos se hizo fuerte al trabajar,

se rió con tu boca, se columpió en tu cabello

y me levó entre tus brazos a bailar.

Vivió cerca de mí por mucho tiempo,

verso y tu cada mañana en mi cintura

erais hombre y poesía, fuego, viento,

tierra y mar, no hubo elemento

capaz de igualar vuestra bravura.

Hoy, maduro ya, este viejo verso

se entrega a mí rendido, confiado,

bien me conoce, son sus besos

con los que durante años me has besado.

No lo dudes amor, este poema

antes que aquí o en mí, en ti vivía,

grande tú lo hiciste y yo llena

de gratitud devuelvo un trozo apenas

a quien llena mi vida de poesía.

                                     SILVIA LORENZO